Jul 26, 2023

¿Cómo desarrollar conocimientos y habilidades a través del juego?

El juego ayuda a fomentar conocimiento y habilidades en los niños, además de ayudarlos a mantenerse activos físicamente. Descubre algunas ideas que impulsarán su aprendizaje.

La actividad física es una manera de mejorar la condición del cuerpo, pero, al realizar movimientos controlados en medio de un ambiente seguro, también se convierte en una oportunidad para enseñarles a los niños ciertos conocimientos y habilidades que le pueden servir tanto para su desarrollo como su interacción con otras personas.

Los deportes y los juegos son maneras prácticas de estipular reglas, compartir con otros individuos e introducir conceptos o valores sencillos que pueden poner en práctica durante su día a día. De hecho, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) recomienda que las actividades recreativas estén presentes en los programas de educación de los niños.

La importancia de practicar actividad física para aprender

La exploración, el aprendizaje práctico y los entornos que favorecen tanto el juego como la actividad física son maneras óptimas para obtener conocimientos, competencias y habilidades esenciales. A través de ideas creativas, entretenimiento, participación y acción por parte de los niños, es más sencillo mejorar su recordación, apropiación y entendimiento de ciertos conceptos, de ahí la importancia de incluirla desde temprana edad.

Puede que términos de matemáticas, ciencias o historia no sean muy fáciles de recordar si hacemos que los niños se sienten junto a un libro y los repitan hasta el cansancio. Pero, fomentar la actividad física con juegos dónde se relaciona el cuerpo con el resto de los sentidos, ayuda a que tus hijos adopten un papel activo y se sientan más dispuestos a ser parte de sus propios procesos de aprendizaje.

Elementos principales del juego o la actividad física

Hay un sinfín de juegos que se pueden convertir en actividad física. Es tan sencillo como realizar una lluvia de ideas junto a tu hijo y definir entre los dos cuáles son las más adecuadas de acuerdo con sus aptitudes, personalidad, edad, capacidades físicas e intereses. Cuando tengas esta lista hecha, analiza que esté basada en los siguientes componentes:

Diversión:
Los adultos identificamos fácilmente cuando un niño está contento y se siente libre y tranquilo para expresarse a su manera. Por eso, más allá de los retos o las frustraciones, tus hijos deben sentir una sensación general de motivación, disfrute y emoción.
Participación:
La implicación directa en los juegos es lo que hace que los niños tengan ganas de involucrarse y le presten atención plena a la tarea que tienen en frente. De hecho, al comprometerse activamente logran combinar actividad física, mental y verbal sin esfuerzo.
No es repetitivo:
La idea de los juegos es que no siempre se realicen bajo los mismos parámetros. La variedad también permite que los niños estén más conectados con lo que hacen. En este sentido, hay muchos objetivos que se pueden cumplir a través de esta estrategia: practicar para competencias, revisar hipótesis, retarse, conectar con sus extremidades, entre otros.

Juegos para desarrollar habilidades y conocimientos

Si como padre o cuidador te interesa brindarle herramientas ideales para su desarrollo, sigue alguna de las ideas que te compartiremos a continuación. Recuerda que lo más importante es procurar un entorno de aprendizaje y entendimiento, en los juegos debemos evitar los regaños innecesarios e intentar que durante el tiempo que dure la actividad la comunicación activa y los momentos de calidad en familia estén presentes.

1. Adivina y muévete

Habilidades y conocimientos: expresión oral y corporal, agilidad mental, capacidad de análisis.
Duración: de 20 a 30 minutos.

En este juego vamos a explorar con adivinanzas. No solo hacen que tu hijo comprenda bien los términos, sino que también lo ayuda a desarrollar un pensamiento ágil. Elige acertijos de acuerdo con su edad. Pueden ser de animales u objetos cotidianos.

Para evitar el sedentarismo, harás esta actividad de pie junto a él y cuando acierte correctamente le pedirás que imite la respuesta. Por ejemplo, que use su cuerpo para simular la forma de una lámpara.

2. Concéntrese

Habilidades y conocimientos: concentración, capacidad de reacción, manejo del tiempo.
Duración: de 10 a 15 minutos.

Un clásico que de seguro todos hemos jugado al menos una vez. Es fácil de realizar y no toma mucho tiempo. Solo necesitas dibujar algunas tarjetas y colocarlas en una pared o en el piso. Haz que seleccionar cada pareja sea más dinámico colocando pequeñas “penitencias” que incentiven a tu hijo a mover el cuerpo.

Por ejemplo, si falla tres veces al seleccionar las fichas, le puedes pedir que realice un baile improvisado de un minuto. Otra idea es hacer movimientos aeróbicos como correr en el sitio o abrir y cerrar los brazos y piernas al tiempo.

3. Juegos de mímica

Habilidades y conocimientos: atención al detalle, expresión oral y corporal, comprensión de órdenes.
Duración: de 15 a 20 minutos.

Es una actividad muy fácil de hacer. Puedes poner un vídeo y junto a él seguir los movimientos o pedirle que sea tu espejo y replique cada una de las acciones que realices. Al tiempo que mueve el cuerpo, intenta practicar algunas palabras que se le dificulten, aunque parezca que se están mezclando muchas tareas en la misma actividad, hazlo poco a poco hasta que notes que tu hijo ya lo tiene dominado.

Otra idea es imitar ruidos de animales y pedirle que adivine cuál es, a través de este juego mejoras su concentración y también le ayudas a reconocer elementos de su entorno. Cuando acierte en alguna de las respuestas, haz que juntos imiten los movimientos del perro, el gato o las aves.

En caso de que tenga problemas de pronunciación, esta es una actividad perfecta para fomentar la escucha activa. Primero, di el término en voz alta por sílabas, luego, nombra la palabra completa y pídele que la replique. Así, verás en qué letras puede presentar dificultad y podrás profundizar en ellas en otro juego.

Desde Nestlé por Niños Saludable impulsamos la actividad física. Por eso, a través de nuestro hábito de Muévete más queremos que tus hijos descubran que hay muchas formas de divertirse y aprender sin necesidad de utilizar aparatos tecnológicos. Conoce ideas creativas e ingeniosas que impulsan en ellos un estilo de vida balanceado. Descubre los pormenores de nuestra iniciativa aquí.

Fuentes:

Autor Nestlé por Niños Saludables